Atención integral a víctimas de Cromañón

El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, firmó con su par de Salud, Daniel Gollan, un convenio de colaboración para consolidar la red de efectores de salud que garantiza la contención y la asistencia prioritaria o de urgencia para las personas que, directa o indirectamente, fueron afectadas por aquella tragedia que dejó 194 muertos y más de 700 heridos. 

Atención integral a víctimas de Cromañón

El acuerdo le otorga al centro especializado en atención a víctimas "Dr. Fernando Ulloa", dependiente de la Secretaría de Derechos Humanos, la coordinación de la red y el seguimiento de los tratamientos.

Desde 2013, y a pedido de los familiares y sobrevivientes de Cromañón que ante la falta de una atención específica en la Ciudad de Buenos Aires, demandaron asistencia de diferentes ministerios del Estado Nacional, el Centro de Asistencia a las Víctimas de Violaciones de Derechos Humanos "Dr. Fernando Ulloa", comenzó un trabajo de asistencia a un número importante de víctimas en tratamientos en salud mental, para evitar las graves consecuencias que genera el desamparo.

En este contexto, el convenio establece formalmente la creación de una red de efectores en el sistema de Salud Público que garantiza una línea de acción prioritaria para la asistencia inmediata de las víctimas para dar una respuesta articulada. El Ministerio de Salud de la Nación aportará profesionales y hospitales nacionales en red, mientras que el Centro Ulloa será uno de los ámbitos de asistencia y centro de referencia para derivaciones, constituyendo en la práctica una red de efectores de salud nacionales, que coordinará la contención y la asistencia prioritaria o de urgencia. 
 
Celeste Oyola, sobreviviente de Cromañón e integrante de la Coordinadora "Memoria y Justicia x Cromañón", calificó el convenio como un "logro histórico que  beneficiará a las víctimas y familiares con una cobertura inmensa en materia de salud física y psicológica”.
 
La joven, que hoy tiene 29 años de edad, recordó que la Ciudad de Buenos Aires aprobó por unanimidad una ley de reparación integral "pero tiene falencias como por ejemplo no cubrir la salud" más allá del ámbito capitalino. Celeste Oyola que vivió casi toda su vida en Villa Celina, partido de La Matanza, de donde eran oriundas muchas de las víctimas, lamentó que 17 sobrevivientes de Cromañón se hayan suicidado en los años posteriores a la tragedia.