Ataque planificado

 El juez que lleva la causa por la violencia desplegada durante la reunión del Consejo Consultivo del 4 de mayo, que casi termina con dos muertos, quiere elevar a juicio oral sólo el caso del intento de homicidio de Rodolfo Corzo hijo contra Matías Scínica de Boca es Pueblo. La querella pidió que se consideren los hechos como un plan común y premeditado.

Ataque planificado

 El objetivo era impedir que los vecinos y organizaciones sociales discutieran el destino de los terrenos de Casa Amarilla. Para eso se hizo presente un grupo que coordinó Rodolfo “El Cordobés” Corzo; para eso, al menos uno de sus miembros, llevó un arma blanca; y para eso, primero se amenazó e insultó y luego se procedió al ataque físico. Esos son los argumentos que acaba de presentar la abogada querellante, María del Carmen Verdú, en la causa que investiga los hechos ocurridos el 4 de mayo en la sede de Pompeya de la Comuna 4. La presentación es respuesta a la intención del juez Roberto Ponce de enviar a juicio oral a Corzo hijo, procesado y detenido por el delito de homicidio en grado de tentativa contra el joven Scínica.

 
“El fraccionamiento conspiraría contra la comprensión del ataque como un todo, y de la forma en que estaban repartidas las funciones y responsabilidades entre los imputados. Y, además, impediría que tanto el Tribunal como la sociedad percibieran la importancia política e institucional del hecho que se juzga”, sostiene el escrito presentado por Verdú.
 
Es que además de Matías Scínica, fueron heridos otros dos miembros de la organización Boca es Pueblo y Fernando Abal Medina de Descamisados, quien quedó inconsciente por los golpes que le propinaron cuando fue a buscar una ambulancia para Scínica y recién obtuvo el alta médica hace un mes.
 
Por otra parte, la Justicia no sólo identificó a Corzo hijo como parte de la patota. Sino que ya indagó como partícipe del mismo hecho a su padre, y está a punto de hacerlo con Ezequiel Yedro. Luego, el juez deberá definir si los procesa, tal como lo hizo con Corzo hijo.
 
En ese sentido, la querella encabezada por Verdú planteó que, según las pruebas testimoniales y fílmicas reunidas en el expediente, “no se trataron de ataques dispersos sino de una intervención premeditada (…) que tuvo a todos como coautores y a Corzo padre como organizador”.

Por eso solicitó que, al menos, se espere la definición sobre la situación procesal de Corzo padre y de Yedro para elevar la causa a juicio oral, incluyendo así a todas las víctimas y a los tres imputados. Aún resta que la Justicia identifique al resto de los integrantes del grupo atacante.