El Gobierno porteño eliminó las Jornadas sobre violencia de género en las escuelas

A contramano de las alarmantes cifras de femicidios que se conocieron en abril, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña decidió eliminar la Jornadas de Prevención y erradicación de la violencia de género y Educación Sexual Integral con el argumento de recuperar los días de clases debido a los paros.
 
El Gobierno porteño eliminó las Jornadas sobre violencia de género en las escuelas

El Comunicado 81 con el que la funcionaria dio a conocer su decisión de levantar las Jornadas llegó a las escuelas el mismo mes en que se cuenta una muerta por día por femicidio y se informa que el 48, 2 por ciento de las asesinadas son adolescentes.

Las cuatro jornadas de Espacio para la Mejora Institucional y las dos jornadas de Educación Sexual serán utilizadas para “dictar clases en los horarios habituales de cada establecimiento educativo”. La justificación que da la ministra es que ese tiempo se utilizará en recuperar los días de clase perdidos “debido a los paros”, aun cuando esos días fueron descontados a los docentes que se adhirieron a las medidas de fuerza. 

Mariana Scayola, secretaria de prensa del gremio Ademys, señaló: “Mientras en nuestro país muere una mujer cada 18 horas el gobierno decide eliminar estas jornadas sumamente necesarias para la prevención de la violencia hacia las mujeres y la educación con perspectiva de género. De hecho una de las jornadas surgió luego del masivo #NiUnaMenos en el año 2016 y es ley. El gobierno debe dar marcha atrás en esta decisión. Llamamos a la ministra Acuña a reflexionar sobre esto y anular el Comunicado 81“.
 
En el mismo sentido, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera) emitió un comunicado en el que señala que “es totalmente retrógrado asociar la educación de calidad sólo a la cantidad de horas de clase. Si hay algún elemento necesario para mejorar la enseñanza son precisamente los espacios que permiten el intercambio de experiencias y reflexiones entre docentes. La educación no es únicamente el momento de la clase. Si no se mantienen los ámbitos para el trabajo institucional toda apelación al discurso de la calidad resulta simple demagogia o atrasa décadas en el debate educativo”.
 
Y agrega: “el Gobierno propone reducir las jornadas de Educación Sexual Integral a dos encuentros de 40 minutos cada uno. Esto demuestra que la gestión Pro no sólo atrasa 40 años en materia pedagógica sino también en términos de Educación Sexual e Igualdad de Género. Transformar una perspectiva educativa transversal en una ‘clase alusiva’ pone de relieve la incomprensión del tema por parte de las autoridades educativas de la ciudad en momentos en que la sociedad asume la dimensión educativa de una problemática social que tiene entre sus consecuencias más graves los múltiples casos de feminicidios.
 
Fuente: Diario Z