Entre marchas y debates avanza la UniCABA

 En diciembre, el Poder Ejecutivo porteño presentó un proyecto de ley que todavía no llegó al recinto. Mientras se moviliza contra la iniciativa, la comunidad educativa impulsó un amparo para solicitar más información.

Por Juan Manuel Castro* 
Entre marchas y debates avanza la UniCABA

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires trabaja en la creación de una universidad para formar docentes que, en la actualidad, asisten a 29 terciarios porteños. La mayor parte de la comunidad educativa rechaza la iniciativa oficial y la vincula a un golpe de efecto en desmedro de la calidad y autonomía de los institutos. La historia es así: El 1 de diciembre pasado, mientras promovía la Secundaria del Futuro, el Poder Ejecutivo porteño elaboró el proyecto de ley para crear la UniCABA y lo envió a la Legislatura porteña. Al cierre de esta edición, todavía se debate en la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología, presidida por Maximiliano Ferraro de la Coalición Cívica en el bloque oficialista Vamos Juntos.

Autonomía o verticalismo

Según el proyecto de ley, la UniCABA “concentrará toda la formación docente de gestión estatal de la Ciudad” y “gozará de autonomía académica e institucional y de autarquía económica financiera y administrativa”. Se “regirá por un estatuto que será redactado por el rector u organizador designado por el Poder Ejecutivo” porteño. El Consejo de Educación Superior de Gestión Estatal de la Ciudad (CESGE), que nuclea a los 29 profesorados, expresó sobre este punto: “El proyecto esconde la decisión del Gobierno porteño de anular la democracia en nuestras instituciones”. Mariano Garrido, secretario de Asuntos Pedagógicos del gremio Ademys, analizó en la misma línea: “Pretenden avanzar en términos políticos sobre la autonomía de un sector que suele ser crítico y con instituciones que poseen cogobierno. El modelo de reemplazo es verticalista, con plenos poderes para el Poder Ejecutivo”. El artículo sexto del proyecto postula que se le transferirá a la UniCABA los “patrimonios, personal docente y no docente, matrícula y sus correspondientes partidas presupuestarias” de los 29 profesorados. Sin embargo, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE – CTERA) alertó que “se disuelve todo el sistema formador porteño y con ello todas las garantías laborales establecidas en el Estatuto del Docente para quienes trabajan en los profesorados”.

Elegir la carrera docente

Sobre la creación de la UniCABA, la ministra Soledad Acuña dijo: “Hoy tenemos 29 institutos que son terciarios. No tienen estudiantes porque los jóvenes no eligen la carrera docente. Tenemos que cambiar la formación de los maestros”. En tanto, el gremio docente Ademys lo refuta y dice: “En 2016, registró 28.119 inscriptos, una de las cifras más altas en términos recientes. A su vez, ese número representa el 77% del total de los estudiantes de profesorados, quedando en el sector privado solo un 23% de la matrícula, con 8.518 alumnos”. Diego Meiriño, subsecretario de Planeamiento e Innovación, dijo que, en base a datos de 2016, de 7.000 anotados se reciben cerca de 1.900. Añadió que ante un plan de estudios de cinco años los estudiantes lo terminan, en promedio, en 7,6 años. Y como Acuña, opinó que “la cantidad de egresados docentes no cubre la demanda del sistema”.

Una ley con transversalidad

La aprobación de la UniCABA es de suma importancia para el Poder Ejecutivo porteño. Ha sido debatido en varias reuniones entre la bancada oficialista Vamos Juntos, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, y su jefe de Gabinete, Felipe Miguel, entre otros. Sin embargo, en la bancada advierten que el proyecto genera rechazo en gran parte de la comunidad educativa. Vamos Juntos tiene 34 de los 60 votos, pero el objetivo es aprobarlo con la mayor transversalidad posible. En plenario, la Unión Cívica Radical porteña dijo que la Ciudad primero debe aprobar una reforma educativa y la bancada SUMA+ presentó un proyecto alusivo que no fue tratado. Bloques como Unidad Ciudadana o el Frente de Izquierda mostraron su total rechazo. Fuentes de la secretaría parlamentaria de la Coalición Cívica, partido al que pertenece Ferraro, dijeron para este artículo que el debate continúa dentro de la Comisión de Educación y que no estaba definida una fecha para firmar el dictamen.

Debate

Desde el comienzo, hubo un rechazo mayoritario a la creación de la UniCABA. Se hicieron varias marchas en el centro porteño, con la presencia de miles de educadores y estudiantes luciendo pañuelos rojos, símbolo de esta lucha. “Se propone una escuela degradada académicamente, con un tercio de su cursada no presencial y promotora de la flexibilidad laboral mediante las pasantías”, contextualizó Garrido, de gremio Ademys. Desde UTE, su secretario adjunto, Guillermo Parodi, expresó: “Hay dos proyectos políticos educativos distintos. Uno es este, que esta calcado de las demandas del Banco Mundial y le pone precio al conocimiento. El otro está sustentado en lo que se llama derecho social a la educación”. Los 16 artículos y sus tres cláusulas transitorias no resultan suficiente información para la comunidad educativa. El Consejo presentó en abril un amparo para pedir datos oficiales complementarios. Lo hizo con patrocinio del Ministerio Público de la Defensa ante el Juzgado Nº 7 del Fuero Contencioso Administrativo de la Ciudad, a cargo de Martín Converset. El junio le anexaron 658 firmas de docentes, alumnos, graduados y miembros de la comunidad educativa. El Defensor Ramiro Dos Santos Freire reflexionó ante este pedido: “No se puede generar un cambio tan significativo sin consultar a nadie y mucho menos sin consultar a quienes le han dedicado su vida y su carrera. Cambios estructurales como éste requieren un debate serio, responsable y consensuado”.

(*) Para la Cooperativa de Editores EBC