La medida fue tomada por la empresa, tras la decisión de no concurrir a sus lugares de trabajo, tomada por los delegados gremiales ante supuestas amenazas de atentados en la red subterránea.

Metrovías, previendo las consecuencias de la medida, implementó un plan de emergencia para evitar la interrupción total del servicio.

Aun así, el alto número de ausentes, provocó que durante toda la jornada las cinco líneas circulaban con demoras de hasta quince minutos.  En tanto, el Premetro no brindó servicio.

Los delegados gremiales, aclararon que la decisión, no constituía una medida de protesta sino de seguridad propia y de los pasajeros.

Afirmaron que desde hace días existen rumores sobre la posibilidad de que se produzcan atentados en líneas de subterráneos en protesta por la llegada del presidente norteamericano, George Bush, para participar de la Cumbre de las Américas, en ciudad marplatense.

Por su parte, la empresa señaló que la Policía Federal Argentina lleva adelante desde fines de la semana última un operativo de prevención y control, especialmente en las estaciones de mayor cantidad de pasajeros para evitar cualquier posible siniestro.