En su búsqueda para generar nuevos enemigos que profundicen la atomización social y la desmovilización frente al ajuste más brutal de la historia, esta vez, Milei apuntó contra la comunidad LGBTQ+ y las mujeres. Primero con sus declaraciones en el Foro Económico Mundial de Davos, donde dijo que: “El feminismo, la equidad, la ideología de género, el aborto y la inmigración, son todas cabezas del mismo monstruo, cuyo fin es justificar el avance del Estado” y llegó a vincular la homosexualidad con el abuso infantil.

Como respuesta, organizaciones de género y colectivos LGBTQ+ se autoconvocaron en una masiva asamblea en el Parque Lezama donde definieron convocar a una gran Marcha Federal del Orgullo Antifascista y Antiracista y accionar en todos los sitios del país.  Ya hay convocatorias en más de 100 localidades y varias ciudades del mundo. 

En un comunicado difundido por las organizaciones convocantes, expresaron su preocupación y rechazo a las declaraciones del mandatario. “Las incitaciones al odio que el presidente pronunció en la Conferencia de Davos no son nuevas, pero sí marcan un antecedente en la radicalidad de su violencia, en su manifiesto deseo de exterminio”, señalaron. Asimismo, el texto destacó la necesidad de generar un diálogo inclusivo y articular respuestas colectivas frente a lo que calificaron como “un problema colectivo”.

Sin embargo, el Presidente fue más allá de sus dichos y presentó un megaproyecto de reformas que incluye la derogación de los cupos laborales para personas trans y con discapacidad, la eliminación del cupo femenino para candidaturas políticas, la discontinuación del DNI no binario y la eliminación de la figura del femicidio del Código Penal.

Con el correr de los días, la reacción de la sociedad empieza a cobrar espesor. A las organizaciones del colectivo LGTB comenzaron a sumarse distintas adhesiones de los gremios y organismos de derechos humanos. El Consejo Directivo de la CGT anunció que dará su apoyo institucional, al igual que las dos CTA.