Un punto

Quien se quede con la mirada facilista sobre el punto de más o de menos de aporte de coparticipación que aplicó Nación sobre la Ciudad estará viendo solo el árbol y no el bosque. Nuestra Ciudad presenta dos realidades corroboradas por cuanta estadística se consulte: es la más rica del país per cápita en cuanto a producto bruto y fue la más beneficiada por la gestión de Macri al frente del ejecutivo nacional.

Un punto

A la hora de cuestionar el decreto presidencial, Macri señala que CABA aporta un 25 por ciento de los recursos y tan solo recibe un 3,5 por ciento, sin embargo cualquier ignorante político e incluso económico se dará cuenta de que media docena de barrios densamente poblados y sin industrias no pueden hacer semejante contribución al bienestar nacional. Salvo que exista lo que muchos se niegan a ver, y algunos más pillos no quieran difundir y es que la inmensa mayoría de las empresas que producen en el interior del país están radicadas y tributan en nuestra Ciudad. Del interior al puerto y de allí al exterior. Todo tan viejo como la historia misma de nuestro país.

A un mes del decreto presidencial, editores de los medios hegemónicos aún tratan de generar preocupación y bronca con frases como “esa poda arruinará la vida de los porteños”; cuando quienes habitamos y caminamos el sur porteño bien sabemos que en el peor de los casos se cambiarán las baldosas de las veredas una sola vez al año o tendremos unos metros menos de bicisenda. Mientras tanto Larreta continúa con lo que mejor ha sabido hacer el gobierno amarillo, brindar negocios inmobiliarios a unos pocos en perjuicio de las mayorías.