El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOC) Nº29, condenó a Torres por “encubrimiento agravado" y "partícipe primario de falsedad ideológica y privación ilegal de la libertad”. Además de la condena a prisión, se lo inhabilitó por 10 años a ejercer cargos públicos.

La querella, representada por Gregorio Dalbón, había solicitado 10 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. La fiscalía, por su parte había pedido seis años y el doble de inhabilitación.

Lucas González fue asesinado en noviembre de 2021 por tres efectivos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires cuando salía de un entrenamiento de fútbol en el club Barracas Central, junto a sus amigos. Torres había sido imputado durante el primer juicio, donde fueron condenados 9 efectivos policiales por el brutal asesinato. Entre ellos, se determinó prisión perpetua para los tres principales imputados: el inspector Gabriel Alejandro Issasi (41), el oficial mayor Fabián Andrés López (48) y el oficial Juan José Nieva (37). 

El fiscal Sandro Abrales sostuvo “el papel de Torres fue determinante en la escena del crimen” ya que “si el plantado del arma salía bien, la impunidad estaba garantizada y la condena y privación de la libertad de los chicos era segura”.

El ex policía tuvo una participación primaria en la "falsedad ideológica y privación ilegal de la libertad agravada" en perjuicio del grupo de amigos.  “Lucas González, como sus amigos Niven Huanca Garnica, Julián Alejandro Salas y Joaquín Zuñiga Gómez, fueron víctimas de violencia institucional y policial con una grave afectación a sus derechos”, apuntó.