Ayer al mediodía se realizó una conferencia de prensa en el Servicio de Paz y Justicia Argentina (SERPAJ) donde se lanzó la convocatoria para marchar esta tarde a la Plaza de Mayo con el objetivo de exigir la liberación de las 16 personas que continúan detenidas en unidades penitenciarias sin conocer su situación procesal.

Se trata de: David Sica, Patricia Calarco Arredondo, Juan Ignacio Spinetto, Camila Belén Juárez, Nicolás Mayorga, Sasha Jazmín Lyardet, Héctor David Mallea, Cristian Darío Ferreira, Juan Pablo Colombo, María de la Paz Cerruti, Ramona Tolaba, Lucía Belén Puglia, Cristian Fernando Valiente, Facundo Ezequiel Gómez, Gabriel Famulari y Roberto María de la Cruz.

Desde el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) explicaron que las 33 personas detenidas en la represión del miércoles pasado cuando miles de personas se manifestaron contra la Ley Bases están acusadas de lesiones, daños, estrago, delitos contra la seguridad, instigación, incitación a la violencia, agruparse para imponer ideas por la fuerza, entre otras acusaciones.

Las organizaciones denunciaron que las detenciones se produjeron al boleo, cuando la gente se retiraba de la zona del Congreso y no estaba cometiendo ningún acto delictivo, que se pudo comprobar en varios videos virales que circularon en los últimos días. Mientras que, los que dieron vuelta y quemaron un móvil de Cadena 3 no fueron identificados ni detenidos.

El sábado, la jueza María Servini resolvió, tras las indagatorias realizadas durante el viernes, excarcelar a 17 detenidos de las 33 personas privadas de su libertad.

 

A la falaz acusación formulada por el fiscal Carlos Stornelli, se suman los malos tratos y las humillaciones sufridas durante los arrestos y dentro de las cárceles federales. Hubo quienes, tirados en el suelo, recibieron patadas y los uniformados les presionaban la cabeza con sus borceguíes. Quienes quedaron al borde de la asfixia. Un joven se desmayó por la presión de los precintos con los que le amarraron los las muñecas. 

Grisel Lyardet, hermana de Sasha, una de las estudiantes de la UNSAM detenidas junto a Camila Juárez, contó que ambas fueron interceptadas por efectivos policiales en tres motos que se subieron a la vereda al grito de “tirate al piso o te disparo y arrastro de los pelos”.

“Buscándolas amedrentar y generar miedo las estuvieron paseando durante toda la noche por distintos puntos de la ciudad hasta que fueron trasladadas a la Alcaldía 15 de Chacarita. Llegaron a las 5 de la mañana y las bajaron del camión a las 8.30. Ahí estuvieron hacinadas esposadas en un pasillo haciendo turnos para sentarse”, relató.

El reclamo continuará el miércoles con la entrega de un petitorio por la libertad de las y los presos a la jueza Servini de Cubría con más de 40 mil firmas, al que adhirieren Madres, las Abuelas (todos los organismos de derechos humanos nacionales) y también organizaciones y figuras internacionales.